30.9.13

La caducidad del paraíso


No quiero que acabe este abrazo,
no deberíamos aceptar la caducidad del paraíso.

Me cuentas que has vivido entre paréntesis
y que la soledad es algo parecido a la vida en diferido.
Yo te cuento que estoy hecha a tu medida
como otros están ya hechos a una enfermedad incurable
y te cuento que conocí a otros
pero que querer acostarse con un hombre
no es lo mismo que querer despertarse con él
porque hay chicos que te alegran la piel
pero no el corazón.

Nos callamos, tú miras el vaso entre tus manos.
La ropa cae y arrastra consigo
una tonelada de tristeza.

Luego duermes y yo pienso
que tal vez sólo sea posible el amor
cuando no lo retienes como a un preso
porque así siempre querrá escapar.
Quizá deberíamos aceptar la posibilidad
de la caducidad del paraíso,
tolerar la intermitencia de la felicidad,
no meternos más en la boca la palabra porvenir
y agradecer que estés
aquí
ahora.


Texto retocado: Marwan

No hay comentarios: